Las aguas subterráneas, presentes en casi todas partes bajo nuestros pies, son con diferencia (99%) el mayor recurso de agua dulce de la Tierra. Cuando llueve, el agua subterránea se recarga y alimenta continuamente ríos, lagos, humedales y aguas costeras. A través de este proceso, los solutos del agua, los contaminantes y las partículas se transfieren continuamente desde la superficie, a través del suelo, a las capas más profundas del subsuelo que, en última instancia, descargan en las aguas superficiales o se extraen de los pozos de abastecimiento de agua y de riego. El agua migra a través de los espacios porosos de los sedimentos y las rocas, las fracturas de las rocas, las fallas de los acuíferos e incluso las cavernas subterráneas (acuíferos kársticos), contaminando potencialmente los valiosos recursos de aguas subterráneas y los ecosistemas dependientes o asociados a las aguas subterráneas.
En EGS, el Grupo de Expertos en Recursos Hídricos se centra en la parte subsuperficial del ciclo del agua, es decir, el agua en la zona no saturada (incluido el suelo) y saturada (aguas subterráneas), y el uso conjunto de aguas subterráneas y superficiales.
En el marco de GeoERA se llevaron a cabo cuatro proyectos sobre recursos hídricos: